SUGERENCIAS

Hola, soy Roberto López. Participé el pasado domingo 26-2-2012, en la marcha ciclista, y, antes de nada, quiero haceros llegar mi enhorabuena por la organización de la misma, ya que me gustó mucho el recorrido. Me dirijo a vosotros para haceros un par de notas, si me lo permitís.

Me imagino que este tipo de eventos, además de una actividad lúdico-deportiva tienen una vertiente social, no menos importante, por su incidencia en la sociedad respeto de la consideración que esta tiene para con el uso de las bicicletas como vehículo, y no solo como elemento deportivo y/o juguete, así pues, no sólo los que participamos en la marcha vamos a sacar una opinión al respeto de la celebración de la misma. En ese aspecto que tengo en cuenta que debe de ser interés de todos que la celebración de las marchas agrade al mayor número posible de personas, y por lo tanto intentar que se moleste a la cantidad menor posible de personas.

Al participar en la marcha observé, ya lo había visto en otras celebradas por la comarca, que los ciclistas, (independientemente de su edad), al circular ocupamos toda la vía, e incluso a veces las aceras, impidiendo la circulación del tráfico en sentido contrario, y poniendo en peligro la seguridad de los demás usuarios de la vía en particular de los peatones. Pienso que esto viene dado por la interpretación, errónea, de que al tener un amparo policial la actividad, (que a veces se denomina día de la bici), los participantes tenemos prioridad para ocupar la vía, con el consiguiente perjuicio para los demás usuarios. Es por lo mismo que incluso se obliga al uso del casco, debía de indicarse a los participantes que, cuando la marcha circule por vías de doble sentido, se haga sólo por carril derecho en las que tengan señalización horizontal y procurando dejar libre la mitad izquierda en las que no lo tengan, para facilitar la circulación en sentido contrario. Asimismo debía de hacerse hincapié en la prohibición de circular con la bici por las aceras.

Estas medidas, además de facilitar el tráfico, fomentan la convivencia entre los ciclistas y el resto de la ciudadanía y refuerzan la toma de conciencia de la necesidad de respetar las normas de circulación, no solo durante las marchas, sino siempre que circulemos por la vía pública, ya cómo peatones, ciclistas o en cualquier otro vehículo. Los ciclistas debemos ser los primeros en respetar para ser respetados y estas marchas inciden, por el número de personas que participan en ellas, en una cantidad nada despreciable de usuarios. Aunque vivo en Cerdido, uso la bici para desplazarme por Ferrol, cuando así lo hago, observo que muchos otros usuarios de la bici circulan por las aceras, con las consiguientes molestias para los peatones, supongo que en parte es por miedo a los coches, pero al ritmo en que está aumentando el uso de la bici, pronto será peligroso o incluso imposible caminar por las aceras.

Por otro lado los automovilistas están tan poco acostumbrados a compartir la vía con las bicis, que por lo general no nos respetan y nos consideran un estorbo. Creo que es preferible que seamos los ciclistas los que asumamos la necesidad de racionalizar el uso de la bici antes de que nos apliquen medidas restrictivas para su uso, y estas marchas pueden ser una buena aportación educacional. No os entretengo más, os saluda Roberto.

          Roberto Óscar López e López 

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